Ayer estabas triste. Dijiste que no sabías si te quedarías con la casa cuando yo no esté. Que era una casa demasiado grande para una persona sola.
Dijiste también que durante el fin de semana, si el tiempo te lo permitía, le quitarías las olivas al árbol.
Me diste ternura, como siempre. Te dije: "Venga, te ayudo, vamos a recoger las olivas. Lo haremos en un momento,"
Caminaste detrás de mi, dócil. Te dije qué barreño debíamos usar para que cupieran todas las olivas. No discutiste.
Parecía como si el tiempo hubiera vuelto atrás.
Nos llevó más de media hora pero las cogimos casi todas. Dejamos algunas para los pájaros.
Te dije: "¿lo ves? ha sido un momento."
"Todo es más fácil entre dos..." fue tu respuesta...
Pena...no pierdas nunca la empatía. Un beso
ResponderEliminarespero que la ira no termine por robármela...
Eliminarun beso
Un besito lucecita
ResponderEliminarGracias :)
EliminarParalela, falta menos.
ResponderEliminarOjalá... estoy redefiniendo el concepto de bolsas bajo los ojos...
Eliminar¿Ves? Eso puede tomarse como una pequeña muestra de esa ciencia ficción de la que hablabas :) No sé si es bueno ahora para ti, solo si te hace sentir bien y no te va a hacer sentir mal luego. Un beso.
ResponderEliminarLa verdad es que este microencuentro ha inaugurado la etapa de la pena profunda... otra etapa del duelo :)
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